En ingeniería y Contratos tenemos experiencia, equipos y personal especializado para ejecución de proyectos de sliplining. Podemos insertar tuberías a tracción o por empuje, y contamos con equipos de inyección, así como sistemas de lavado o limpieza mecánica y televisación, que son necesarios para asegurar la correcta ejecución de una rehabilitación mediante sliplining.
Hemos deslizado incluso tubos de concreto de 1.8m con peso de 7 toneladas por tubo.
Según el material de la tubería insertada como revestimiento o encamisado, los tubos pueden insertarse uno a uno, o puede prepararse una sarta o lingada de tubería (por ejemplo, polietileno) e insertarla en una sola operación. La nueva tubería puede ser en materiales como PVC, PEAD, GRP, o incluso acero, concreto (hormigón) o hierro. En general, se usan materiales que puedan someterse a tracción o a empuje, preferiblemente con acabado exterior liso.
A diferencia de otras
tecnologías como CIPP, la sección transversal de la tubería presenta una disminución significativa, de uno o más diámetros comerciales puede debe dejarse un espacio entre el tubo nuevo y el tubo viejo, el cual se rellena posteriormente con un grout encargado de transferir la carga del suelo a la nueva tubería. Además, según la flexibilidad de la tubería a instalar y la geometría de la aplicación, suele ser necesario excavar uno o dos pozos.
Como paso previo a un proyecto de sliplining, se requiere el aval del diseñador para reducir el diámetro de la red. Adicionalmente, es necesario televisar e identificar el espacio libre real en la tubería, removiendo cualquier obstáculo que pueda causar atascamiento a los tubos que se van a deslizar. Para ello contamos en Ingeniería y Contratos con varios tipos de
cámara para inspección CCTV, así como herramientas de
lavado,
waterblasting, limpieza mecánica y robots fresadores que son seleccionadas según las condiciones del proyecto.
Si bien se trata de la tecnología sin zanja más antigua y conceptualmente más simple, el sliplining se ha tecnificado significativamente en las últimas décadas gracias al uso de este tipo de herramientas, lo que permite acelerar la ejecución de las obras y reducir o eliminar los problemas de instalación, manteniendo los estándares de calidad requeridos.